CREER NO CREER...
Creer es una cosa y saber es otra distinta, creemos y creemos y creemos, podemos llegar a sentir lo que creemos pero la certeza y la seguridad de algo lo da la experiencia, la vivencia, y a eso le llamamos saberlo.
Por qué lo sabes, preguntamos, lo sé porque lo sé y eso cómo es, lo sé porque lo he visto, lo he vivido, lo he sentido, lo he presenciado, lo he experimentado y eso es lo que nos lleva a la seguridad y la confianza.
Las palabras a veces pueden llegar a confundirnos, porque las palabras tienen interpretaciones y cada uno puede ver o sentir en la interpretación de una manera distinta, pero en el sentir que cada uno tiene no hay duda dentro de uno mismo.
A lo mejor ha llegado el momento de trascender una palabra cuando alguien la pronuncia, a aprender a comprender desde dentro de su energía para que no haya ningún error en la interpretación porque ya no interpretaría la mente con su estado lógico, sino que no haría falta interpretar la palabra, con el gesto, la mirada, el sentir de la energía, el corazón, trascenderíamos. y habría fluido de energía no posesión de energía.
Creer, no creer, eso también es creencia
Experimentar, saber, esto es una vivencia.
No creas por lo que dicen, si no vives la experiencia te quedarán muchas dudas cuando no lo experimentas.
Creer, no creer está en la misma frecuencia porque es la dualidad, dimensión donde se expresa y eso te lleva a engaños, te introduce en una selva, donde siempre hay dos bandos, enfrentamientos y quejas.
Tu estado de Unidad te mantiene muy alerta y aunque puedas dudar, la puerta se queda abierta y es ahí que encontrarás una respuesta completa pues es en integridad donde la verdad se expresa.
Creer no creer es el ego el que interpreta, desde la Unidad del Ser no hay para nada creencia, porque aquello es como Es y es tan sólo evidencia, sin cambios ni alteraciones, es la verdad no se altera.
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